El gasto en alimentación de los consumidores gallegos se redujo en 19 € al mes desde antes de la crisis económica
El 36% de la población gallega dedica entre 200 y 350 euros mensuales a alimentación
La Unión de Consumidores de Galicia viene de presentar los resultados de su estudio ‘Hábitos Alimentación 2019’ un trabajo que recoge 1.142 encuestas realizadas entre septiembre y diciembre de 2018 que fueron distribuidas atendiendo al reparto poboacional y de edad de las cuatro provincias gallegas.
Entre los objetivos de este estudio destacan conocer los comportamientos de las personas consumidoras en lo tocante a sus hábitos de compra, sus preferencias, el gasto estimado en alimentación de los hogares gallegos, la frecuencia con la que se consumen diversos grupos de alimentos y, también, como afectó la crisis económica al gasto en alimentación y a los hábitos de compra de gallegos y gallegas.
Aspectos económicos
Se analizaron los cambios en los hábitos de compra de los hogares gallegos atendiendo a las variaciones de su capacidad adquisitiva para saber si como resultado de las dificultades económicas de los últimos años modificaron sus comportamientos. Más de un 50% de las personas encuestadas respondieron afirmativamente a la pregunta de si la situación económica de los últimos años provocó cambios en sus hábitos de compra. Por edades, la franja más afectada fue la comprendida entre los 51 y 60 años. Por provincias, los que cambiaron en mayor medida sus hábitos de compra fueron los pontevedreses (63,03%) seguidos de los habitantes de la provincia de Lugo (55,86%), los de A Coruña (53,50%) y ya, por último, los de Ourense (49,02%).
En relación a las medidas adoptadas por los hogares gallegos para adaptarse a la situación económica casi el 70% se decantó por la búsqueda de ofertas, un 62,52% por el mejor aprovechamiento de los alimentos y, consecuentemente, una reducción del desperdicio de los mismos. En tercer lugar, apostaron por las marcas de distribución.
A mayores, buscamos conocer la variación en el consumo de determinado tipo de productos alimenticios en los tres últimos años. La evolución del consumo de productos frescos muestra un saldo positivo de casi un 17%. Por edades, son los mayores de 60 años los que más apuestan por estos productos (21,89%) y los que menos los grupos de edad de entre 41-50 (9,17%) y 51-60 (12,16%). También aumenta el consumo de productos locales (saldo positivo de más del 28%), este aumento es especialmente alto en las personas de entre 41-50 años (34,81%). El mejor dato es para los productos de temporada, su evolución positiva supera el 31%. Por edades, son los menores de 30 años los que más apuestan por ellos (36,93%).
Gasto en alimentación
Para establecer cómo afecta la capacidad económica de las familias a su gasto en alimentación se preguntó cuál era el gasto mensual actual en alimentación y cuál era antes de la crisis. El resultado arroja una realidad preocupante, los gallegos y gallegas destinan menos dinero a sus gastos en alimentación del que destinaban antes de la crisis. Existe una gran variación a la baja en el porcentaje de personas que más gastaban en alimentación antes de la crisis, su movimiento a otros tramos de gasto resulta revelador.
El número de hogares que gastaban más de 500 euros en alimentación disminuyó en más de un 26% en la última década, y hay una reducción de un 17% en los hogares que gastaban entre 350 y 500 euros. En el extremo contrario, el número de hogares que dedicaban entre 100 y 200 euros al mes para alimentación aumentó casi un 21% y de los que gastan entre 200 y 350 euros, casi un 17%.
Conviene señalar que el gasto medio actual en alimentación está en 293 euros al mes pero antes de la crisis los hogares gallegos gastaban de media 312 euros. Tengamos presente que los salarios de los trabajadores fueron en 2018 inferiores a los de 2008 y que el precio de los alimentos subió en los últimos años.
Frecuencia en el consumo de alimentos
El estudio recoge los hábitos de consumo de gallegos y gallegas de distintos grupos de alimentos a fin de tener un conocimiento más detallado de la dieta desde la perspectiva de una alimentación equilibrada.
Las cifras muestran que el consumo de verdura y hortalizas dista de los consejos actuales y que estos datos se agravan en los consumidores de menor edad ya que sólo un 27,45% de los menores de 30 años consume verdura a diario. Así mismo, el consumo de legumbres debería mejorarse.
El consumo de fruta brinda un buen dato, cerca del 65% de las personas encuestadas comen fruta a diario. Por edades, la franja de entre 18 y 30 años es la que consume fruta con menor frecuencia, el 4,31% manifiestan que nunca consumen fruta y el 32,55% lo hace con una frecuencia inferior a 3 días a la semana. A medida que aumenta la edad aumentan también la frecuencia de consumo. Casi el 80% de las personas mayores de 60 años comen fruta a diario.
Las cifras sobre consumo de pescado establecen que casi un 48% de la población gallega consume pescado dos o tres veces por semana. Sin embargo, más del 27% solo lo consume una vez. Por edades, los datos son preocupantes en la franja de menores de 30 años ya que más del 37% indica que solo lo consume una vez por semana y casi un 19% con menor frecuencia o nunca.
Los datos referidos al consumo de carnes rojas y procesadas son muy superiores a los consejos de consumo realizados por expertos y profesionales. Más del 44% de los gallegos y gallegas consume este tipo de carnes dos o tres veces por semana y supera esta frecuencia más de un 20%. Por edades, son los consumidores de entre 41 y 50 años los que los consumen con mayor frecuencia (72%).
En relación al consumo de pan, por provincias es Ourense la que tiene la mayor frecuencia en el consumo diario (83,17%), seguida de Pontevedra (76,75%), Lugo (74,75%) y A Coruña (72,41%). Por edades, son las personas mayores de 50 años las que hacen con mayor frecuencia un consumo diario de pan (85%).
El consejo sobre la frecuencia de consumo diario de productos lácteos se cumple en Galicia, tres de cada cuatro personas cumplen la recomendación. Por provincias es A Coruña (80,21%) donde el consumo diario de lácteos consigue el mejor dato y Ourense la que peor cifras arroja (70,59%). El dato preocupante es lo que se refiere a la frecuencia de consumo entre las personas menores de 30 años ya que la cifra de consumo diario es del 63,14%, más de quince puntos por debajo de la de los mayores de 60 años.
Aspectos destacables de las compras de alimentación
Atendiendo a los datos destacamos un incremento en la opción de compra tanto en el pequeño comercio como en mercados. Por edades, la compra en mercados y plazas resulta más atractiva para las personas de mayor edad, el mayor porcentaje se concentra en el segmento de entre 51 y 60 años. Son los menores de 30 años los que optan menos por esta tipología de establecimientos, no llegan al 20%. En esta franja de edad domina el formato de supermercado, más del 90% de las personas entre 18 y 30 años opta por ellos. El pequeño comercio consigue su mayor cuota de aceptación en la franja de entre 41 y 50 años (39%) y la peor entre los menores de 30 años.
Una tendencia que ya mostraban estudios anteriores de la UCGAL muestra que las personas consumidoras gallegas están disminuyendo el número de compras semanales, así más del 57% de las personas encuestadas realizan sus compras 3 o más veces por semana. En este grupo hay más mujeres (32,96%) que hombres (25,71%). Por edades, son las personas mayores las que más realizan su compra a diario. En el lado contrario vemos que son las personas más jóvenes las que compran con menor frecuencia.
En lo que se refiere a los aspectos que inciden en la opción de compra, la calidad sigue a ser el aspecto dominante entre gallegos y gallegas con más de un 83% que la consideran ‘Bastante o muy importante’. En segundo lugar está la opción de producto fresco (72,65%) y la variedad de productos en tercer puesto (61,63%). El precio aparece en quinto lugar, siendo un factor determinante para un 50.09% de las personas consumidoras.