Crecen las ventas de refrescos y las variedades sin azúcar
La aportación del sector de Bebidas Refrescantes a la economía española ya supera los 10.700 millones de euros
El sector de las bebidas refrescantes acentúa su impacto en la economía española con una contribución que supera los 10.700 millones de euros de valor añadido bruto (VAB) total. En concreto, la aportación económica de la actividad de elaboración de refrescos creció cerca de un 15% en el último año. Así se refleja en el Informe de Impacto Social y Económico del Sector de Bebidas Refrescantes en España realizado por la consultora financiera AFI, que también pone de manifiesto el potente efecto tractor de esta industria en otros sectores estratégicos como la hostelería, la agricultura o la distribución.
Su impacto en la economía y el efecto arrastre se ven reflejados en que cada euro de valor añadido que se genera en la industria revierte en casi 3 euros en la economía española.
El impacto del sector también se materializa en generación de empleo. En total, la industria de los refrescos aporta unos 176.000 puestos de trabajo en el país, de los cuales más de 68.000 son empleos generados de forma directa a través de las actividades de elaboración y comercialización de bebidas refrescantes. Estos datos del último año se consolidan en los resultados del primer semestre de 2023, que ya apunta a un crecimiento del 5% en la contribución de este sector al empleo.
La actividad económica que genera la elaboración de refrescos en nuestro país tiene a su vez impacto en las arcas públicas, con una contribución que supera los 2.000 millones de euros en el último ejercicio.
Un sector con impacto en todas las comunidades autónomas
El impacto social y económico del sector de las bebidas refrescantes también se observa a escala regional. Este sector tiene un fuerte arraigo en el país -con más de 200 años de historia en España- y está presente en todas las comunidades autónomas. En concreto, el tejido empresarial de esta industria cuenta con 148 centros de actividad repartidos por todo el territorio nacional. De ellos, el 15% se sitúan en zonas rurales, actuando como dinamizadores de los municipios donde se ubican.
Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia y País Vasco son algunas de las comunidades autónomas en las que el sector tiene un peso más destacado. Estas cinco regiones albergan el 60% de los centros productivos y generan más de 4.000 millones de euros de aportación económica y cerca de 66.300 puestos de trabajo en total.
El sector de las bebidas refrescantes consolida la recuperación postpandemia y crece un 15% en ventas hasta superar los 4.300 millones de euros. El buen comportamiento del comercio exterior contribuye a estos resultados, con un superávit comercial en máximos, pero sobre todo la estabilidad del consumo interno, puesto que el 94% de los refrescos que se consumen en España se elaboran en España.
El consumo de bebidas refrescantes en España también se recupera a niveles previos a la pandemia. En 2022 se comercializaron 4.357 millones de litros, un 10% más que el año anterior, gracias al auge del turismo y la recuperación del canal hostelero, que es el principal canal de consumo de esta categoría (60%). Si nos fijamos sólo en el consumo de los españoles, el consumo per cápita se sitúa en torno a los 47 litros anuales, reflejo del estilo de vida mediterráneo y social que caracteriza al país. De hecho, 8 de cada 10 ocasiones de consumo de los españoles se producen en momentos de encuentro y ocio en compañía de familiares y amigos.
Además, aumenta la demanda de las variedades bajas y sin calorías, que ya suponen un 60% de la oferta de bebidas refrescantes en el mercado, con un crecimiento del 4,4% en su consumo en el canal hostelero.